Porque no es lo mismo digitalización que transformación digital

Porque no es lo mismo digitalización que transformación digital

Todavía hay dificultades para diferenciar entre digitalización y transformación digital, es decir, entre tecnología y las oportunidades de negocio que ofrecen

Seguramente gran parte de la culpa la tengamos los que nos dedicamos a esto del marketing digital. La confusión existente entre los términos digitalización y transformación digital no es únicamente un debate técnico, es algo que puede tener consecuencias negativas para muchas empresas y que incluso puede afectar a sus resultados económicos a medio y largo plazo.

Y esta confusión, que como digo nace de los propios consultores de marketing, se ve reflejada posteriormente en las estrategias de marketing digital de la que se hacen eco otros profesionales del sector e incluso los medios de comunicación.

Por otro lado esta asociación de términos se extiende a muchas empresas y profesionales decididos a reflejar una imagen corporativa o de marca personal «moderna» que sin dudarlo lo guardan todo en el cajón de sastre de la Transformación Digital.

¿En qué se diferencian?

Lo que actualmente se entiende por digitalización es lo que hace años llamaban informática o sistemas de información, o IT, y que muchas empresas han descuidado de forma notable, fundamentalmente por los elevados costes que suponen.

La brecha entre las operaciones y la tecnología que las soportan se ha ido ensanchando con los años, no solo en lo referente al software, también en lo que afecta a la integración de equipos, trabajo y métodos.

Porque el gran coste de la digitalización radica en ponerse al día de la deuda tecnológica adquirida a lo que hay que sumar la implementación de las nuevas de manera que convivan con metodologías ágiles y efectivas . Este es el reto de la digitalización.

Algo similar ocurre con el concepto de omnicanalidad. Si ya había un retraso de más de diez años por parte de las empresas en incorporar el comercio electrónico a sus estrategias, la extensión del uso del teléfono móvil y las redes sociales sociales aceleró el proceso.

Hemos visto como la omnicanalidad se ha utilizado como mecanismo de defensa para detener la pérdida de clientes y en muchos casos también hemos sido testigos, por desgracia, que empresas consolidadas han ido perdiendo grandes cuotas de mercado conquistadas e incluso han acabado desapareciendo.

Y es aquí donde aparece la transformación digital como elemento clave, es decir, en las oportunidades que ofrece la tecnología para generar nuevos modelos de negocio.

El cambio de los mercados hace que el nuevo modelo empresarial no solo esté basado en el uso de la tecnología, ni tan siquiera en la integración de canales, tiene más que ver con las oportunidades que estos elementos nos ofrecen para generar nuevos modelos empresariales y cuyo reto es crear y entregar valor.

Esto implica que las empresas y profesionales deben reconsiderar los márgenes y los plazos establecidos y realizar un esfuerzo de investigación constante sobre las distintas posibilidades estratégicas que ofrece la transformación digital y decidir el rumbo a seguir.